Te sigo extrañando...
Aun siento tu sonrisa,
y hasta puedo disfrutar de tu aliento.
Aún...
A pesar de tanto tiempo,
después de tantos años...
Muy a pesar de nuestros destinos tan separados
muy a pesar de las distancias tan abismales.
Aún y sobre todas las cosas,
sigues aqui en mi pensamiento
guardado desde aquella primera vez que te miré.
Tu olor aún no se desvanece de mi cuerpo,
ni tus caricias de mi piel.
Y pasa el tiempo, y creo haberte olvidado...
¡Absurdo engaño!
Cierro los ojos y vuelves a aparecer.
Solo que ahora tengo un problema,
por más que trato de dibujarte en el espacio
tu silueta se borra...
No atino a recordar el borde de tus labios,
ni el color exacto de tus ojos.
Y lloro, y me desangro de rabia y de coraje,
por intentar recordarte, en vez de tenerte aquí
entre mis brazos amandote, como lo propusiste una vez.
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